Reconocidas e interpretadas correctamente, tus señales internas de saciedad son un indicador que te ayuda a determinar cuánto comer de una forma más sencilla y natural.
En específico, te ayudan a determinar cuándo terminar de comer.
Como regla general: si te sientes físicamente satisfecho, ya no necesitas seguir comiendo.
Suena fácil, pero como todo, requiere de práctica.